La luz puede ser un elemento de diseño más, y es que es al final es uno de los bienes más preciados y la forma en la que aparece en los distintos espacios puede cambiar totalmente la percepción de estos. En ciertas construcciones tradicionales como por ejemplo los bajocubierta uno de sus mayores "contras" es precisamente la poca luz ya que no se concibieron como espacios habitables, de ahí que en las reformas de este tipo de espacios la búsqueda de la luz se convierta en el elemento clave. Esto es precisamente lo que ocurre con esta vivienda en Madrid del estudio Cumulolimbo.
La estructura de madera se convierte en la protagonista gracias a la apertura de grandes huecos entre las vigas y consiguiendo transformar el espacio en un lugar lleno de luz. Los materiales elegidos como el suelo de microcemento o el color negro aportan un toque industrial a las estancias, si bien la madera o el color rosa le dan ese punto de calidez.
Como detalle nos parece muy interesante la utilización de cortinas como elementos separadores, ya que permiten un uso muy flexible del espacio.
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