Si una vivienda hace las veces de galería de arte, el proyecto cuanto menos crea buenas expectativas, y lo cierto es que esta vivienda en París de Batiik Studio las cumple y con creces. Espacios bien diseñados, donde su mayor cualidad es el equilibrio en el contraste de distintos elementos.
En la cocina donde se combina la calidez de la madera con la frialdad del acero inoxidable de forma espectacular, el suelo blanco y las vigas y pilares de madera recuperados o la pieza de madera que unifica el acceso, una escalera de acero y líneas rectas y la otra en madera y líneas curvas, la estructura de madera que se vuelve blanca cuando aparece el terrazo en el suelo.
Y además de este juego de contrastes nos parece espectacular el cerramiento de madera con líneas curvas del dormitorio y el diseño del baño, donde la combinación de la uniformidad del microcemento con la textura del zócalo o del terrazo de la ducha es más que un acierto.
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