Este proyecto de
Avenue Design Studio en Rotterdam parte de la colaboración del estudio de interiorismo y del estudio de arquitectura, y es la demostración de que cuando las conexiones entre equipos son buenas, los resultados son espectaculares.
Un maravilloso
espacio a doble altura con grandes ventanales que acoge la escalera y se convierte en el
elemento articulador del espacio, un
suelo de cemento pulido y una pared de ladrillo visto que contrastan con la calidez de la
cocina en roble y la fabulosa
encimera esmeralda de piedra natural.
Y como no podía ser de otra forma, los detalles están cuidados al máximo, desde la
grifería en cobre en los baños, donde además el
encuentro entre materiales cerámicos se ha resuelto de forma elegante hasta las
cortinas de lino de suelo a techo que hacen las veces de
puertas de armario.
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